Al término de la Primera Guerra Mundial, los conflictos bélicos habían afectado severamente a los alemanes en lo psicológico y esto se puede ver en el filme Nerven, donde los personajes pierden la razón al revivir las imágenes traumáticas del campo de batalla, o en El gabinete del Dr. Caligari, película que muestra cómo las instituciones mentales están repletas de gente que perdió la cordura por diversos motivos.
No obstante, la guerra también dañó a muchas personas en la físico, por las calles se observaban individuos sin partes específicas del cuerpo y que, lamentablemente, ahora debían deambular usando prótesis o utilizando bastones que los guiaban por caminos inciertos, o simplemente individuos que permanecían tirados en el piso vendiendo diversos productos. Uno de los más importantes artistas que reflejaron la vida trágica de los participantes de la guerra, fue Otto Dix, quien incluso tituló una obra como Lisiados de la guerra, cuadro en el que se observa a cuatro militares siguiendo la orden de un brazo blanco que puede interpretarse como el recuerdo de las antiguas órdenes que seguían durante la Primera Guerra Mundial. Lo resaltante de esta obra es que las personas aún creen en una nación hecha trizas que, asimismo, dañó su cuerpo y les suplantó sus piernas y brazos con prótesis. Incluso, el segundo militar no sólo perdió partes de su cuerpo, sino también su identidad, debido a que Dix pinta un rostro con diferentes dimensiones que, a su vez, no son reconocibles. Es decir, Lisiados de la guerra muestra la desfiguración física y mental de las personas que participaron en la guerra.
Aunque las primeras pinturas de Dix no fueron desarrolladas en Berlín, sino en Dresde, sí ofrecían un panorama general de los problemas que las personas padecieron durante la República de Weimar. Sin embargo, una de sus obras más famosas no tiene una temática sobre los conflictos bélicos, sino sobre el Retrato de la bailarina Anita Berber, famosa artista que apoyaba proyectos cinematográficos importantes, como es el caso del filme Diferente a los demás, película que es considerada una de las primeras cintas de la Alemania de entreguerras y que trató las dificultades que se enfrentaban las personas homosexuales, debido a que en el párrafo 175 de las leyes de dicha nación, la homosexualidad era considerada un delito grave que se pagaba con prisión.
Incluso en el inicio de la película se intenta explicar cómo las personas preferían quitarse la vida a continuar ser chantajeadas por algunos ciudadanos que cada vez exigían cuotas más altas para que no revelaran sus preferencias sexuales. De igual manera, otro aspecto importante en esta cinta, es que intenta explicar la homosexualidad desde la psicología y la psiquiatría, mostrando una historia LGTB+. Sin embargo, con el paso del tiempo, esta película fue prohibida debido a que se instauró la censura en 1920 y, posteriormente, el famoso Partido Nacionalsocialista consideraría este filme un arte degenerado, destruyendo las copias alemanas, pero no las que fueron esparcidas por Europa mucho antes del régimen de Hitler.