¿Para qué sirve la literatura? Es muy difícil responder esta pregunta. Sin embargo, con el reciente suceso de Salman Rushdie, surge otra duda, si la literatura no sirve para nada, entonces ¿por qué siempre han intentado asesinar a los escritores o a las escritoras?
Existen muchísimos ejemplos: García Lorca fue asesinado por el gobierno
español; Roque Dalton fue desaparecido por el gobierno salvadoreño y por los
comunistas; Marina Tsvietáieva fue hostigada por la URSS, matando a su familia
hasta ocasionar que ella se quitara la vida; y, por su puesto, suponiendo que
alguna vez Sócrates haya escrito algo, también lo hicieron tomar veneno.
Lamentablemente, siempre hay una excusa para justificar todos estos actos: Lorca era homosexual o tenía problemas con otras familias; Dalton se rebeló contra los comunistas; Tsvietáieva era una revoltosa; Sócrates corrompía a los jóvenes, etcétera, etcétera, etcétera...
La cuestión aquí es que a través de sus reflexiones ya sean expresadas verbalmente como Sócrates, o expresadas en papel como los otros escritores o escritoras, dejan en claro que la literatura sirve para algo: puede decirse fácilmente que es para la libertad de expresión, como lo hizo Sor Juana para criticar a la Iglesia; también puede servir para dejar un rastro en la historia de la humanidad, como lo demostró Cervantes con su famoso Quijote; o si hablamos de libertad, puede servir para oponerse a los sistemas políticos totalitarios, como lo hizo George Orwell con su novela 1984; también tiene como función darle sentido a la vida cuando alguien se oculta en una casa durante la ocupación alemana (¿hace falta mencionar a Ana Frank aquí?). Asimismo, sirve para burlarse de la lógica y las guerras que ocurrieron en el siglo XX, como lo hicieron casi todos los artistas vanguardistas; tal vez tiene otras funciones más la literatura, pero con esos ejemplos bastan.
Por otra parte, aunque se diga que estudiar o crear literatura o filosofía,
dejará a las personas en la ruina, resulta ser un argumento extraño, porque muchos
escritores han tenido dinero o han generado muchísimo. Por ejemplo, Vicente Huidobro venía de una familia muy rica; Virginia Woolf también venía de una
familia adinerada; se dice que Ernest Hemingway ganaba un dólar por palabra; el
filósofo Wittgenstein incluso renunció a su herencia multimillonaria.
Viendo esto, muchos en la historia de la literatura venían de grandes
familias, debido a que la alfabetización, la lectura y la escritura no siempre
fueron para todos y, por eso, la Iglesia duró muchísimo tiempo en el poder
durante la Edad Media.
La cuestión es que la literatura sirve para algo, pero para algo en
concreto, no se sabe. Y peor aún, los escritores no siempre están conscientes
si lo que escriben está criticando a una religión, a un sistema político o a
una creencia del sentimentalismo.
Por estos motivos, contestar directamente la pregunta, es algo muy arduo,
debido a que no existe una razón única como puede ser en otras áreas del
conocimiento, pues este tipo de arte -o mejor dicho, el arte en general- puede
servir para todo, incluso para apoyar causas que atentan en contra de la
humanidad, como es el caso de Paul Éluard. En este sentido, la verdadera
pregunta sería: para ti, ¿para qué sirve la literatura?