Si te gusta escribir cuentos, novelas o guiones, necesitas conocer qué es
un narrador y cuáles son sus tipos.
¿Qué es un narrador?
Dentro de la literatura siempre existe una voz ficticia que relata los diversos
sucesos que ocurren en una historia. Este recurso literario se conoce como narrador y permite a los
lectores saber todo lo relacionado con el tiempo, los lugares, los personajes y otros elementos que
existen dentro de una obra. Sin
embargo, cada narrador tiene ciertas especificaciones y/o limitaciones. Por tal
motivo, es necesario revisar cada uno de los tipos de narradores que se pueden
encontrar en un libro.
Narrador omnisciente
Este tipo de narrador conoce todo sobre los personajes que se encuentran en
la historia que se está contando, sabe lo que piensan, lo que sienten, lo que
soportan, incluso lo que quieren hacer en un futuro.
También conoce todos los aspectos geográficos que existen en la narración,
y sabe lo que le ocurrió a los personajes en el tiempo pasado, presente y
futuro.
El narrador omnisciente es muy utilizado en muchas obras, por ejemplo, en Casas
muertas, de Miguel Otero Silva:
Sebastián se enderezó lentamente sobre la red del chinchorro. Pensó en el viejo revólver que le había regalado la señorita Berenice y que estaba ahí, en un baúl sin cerradura, al alcance de su mano.
Narrador de conocimiento relativo
Este tipo de narrador conoce sólo lo que puede ver en un momento
determinado, dando cuenta solamente de los aspectos exteriores de los
personajes y de su entorno.
El narrador de conocimiento relativo no conoce lo que piensan o sienten los
personajes, menos la información que guardan.
Este recurso es muy utilizado en diversas obras, pero particularmente se
encuentra en el cuento “Los amigos”, de Julio Cortázar:
Exactamente en ese momento, Beltrán puso el coche en marcha y sacó el brazo por la ventanilla. Tal como había previsto, Romero lo vio y se detuvo sorprendido. La primera bala le dio entre los ojos, después Beltrán tiró al montón que se derrumbaba. El Ford salió en diagonal, adelantándose limpio a un tranvía, y dio la vuelta por Tacuarí.
Narrador protagonista
Este tipo de narrador cuenta sus pensamientos al lector o la audiencia,
también relata los sucesos de su pasado, presente y futuro. Se utiliza la
primera persona del singular para relatar eventos, y su principal
característica es que sólo puede saber lo que ve y siente, así que no puede conocer
lo que piensan o sienten otras personas.
El narrador protagonista es muy utilizado en muchas obras, por ejemplo, en
la obra En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust:
Mucho tiempo he estado acostándome temprano. A veces, apenas había apagado la bujía, cerrábanse mis ojos tan presto, que ni tiempo tenía para decirme “Ya me duermo”. Y media hora después despertábame la idea de que ya era hora de ir a buscar el sueño, quería dejar el libro, que se me figuraba tener aún entre las manos, y apagar de un soplo la luz.
Narrador testigo
Este tipo de narrador puede ser un personaje secundario de la historia. Su
objetivo principal es dar cuenta de lo que ha visto, escuchado o conoce sobre
una determinada situación. Por tanto, su conocimiento sobre la historia, el
tiempo y otros personajes, es limitado.
Este recurso narrativo es muy utilizado en las historias de detectives o en
las novelas negras, pues el personaje debe revelar información valiosa para que
continúe la historia.
Veamos un ejemplo de cómo lo utiliza Rodolfo Walsh, en “Cuento para tahúres”:
Salió no más el 10 -un 4 y un 6- cuando ya nadie lo creía. A mí qué me importaba, hacía rato que me habían dejado seco. Pero hubo un murmullo feo entre los jugadores acodados a la mesa del billar y los mirones que formaban rueda. Renato Flores palideció y se pasó el pañuelo a cuadros por la frente húmeda.
Estos son algunos elementos que componen al narrador y sus tipos. Sin
embargo, pueden existir variaciones y diferencias teóricas.